La Filosofía Empresarial Básica del Grupo Panasonic 4. El Credo de la Empresa y los Siete Principios

El «Credo de la Empresa» y los «Siete Principios» expresan nuestra actitud hacia la forma en que debemos realizar nuestro trabajo diariamente como empleados del Grupo Panasonic.

El Credo de la empresa: El progreso y el desarrollo se pueden conseguir únicamente aunando esfuerzos y con la cooperación de cada empleado de nuestra empresa. Unidos en espíritu, apostamos por el desarrollo de nuestras funciones corporativas con dedicación, diligencia e integridad.

Para contribuir al desarrollo de la sociedad a través de las actividades empresariales, es esencial que todos colaboremos y trabajemos juntos cada día con sinceridad. Sólo cuando las organizaciones establecen sus propios y máximos objetivos, sus miembros los comprenden plenamente y los hacen suyos, y sólo si existe un trabajo en equipo basado en la confianza mutua, es cuando una organización puede lograr sus objetivos y, por tanto, el desarrollo de la sociedad.

Contribución a la Sociedad: Nos comportaremos en todo momento conforme a los Objetivos Básicos de Gestión, cumpliendo lealmente con nuestras responsabilidades como industriales para con las comunidades en las que realizamos muestras actividades.

Nuestra misión es contribuir al desarrollo y la prosperidad mundiales, así como a la armonía con el medioambiente global a través de nuestras actividades empresariales, con el fin de hacer realidad una «sociedad ideal». Con esta idea siempre en mente, a través de nuestras operaciones diarias, debemos comprometernos a lograr una calidad, un coste y un servicio insuperables.

Justicia y honestidad: Seremos justos y honestos en todos nuestros tratos comerciales y en nuestra conducta personal. No importa el grado de talento y de conocimientos que tengamos, sin integridad personal no podremos ganarnos el respeto de los demás ni mejorar nuestra propia autoestima.

Debemos respetar las normas y reglas de la sociedad como algo natural, y también debemos llevar a cabo nuestras actividades de una manera justa e imparcial, en ningún caso de manera egoísta. Es importante comportarse siempre con integridad y con sentido de juego limpio. Sin esta forma de pensar, incluso aquellas personas con grandes conocimientos y mucho talento, no estarán cualificadas para ser miembros del Grupo Panasonic.

Cooperación y Espíritu de Equipo: Aunaremos nuestras competencias para conseguir los objetivos que compartimos. No importa el grado de talento que tengamos como individuos, sin cooperación y espíritu de equipo, formaremos una compañía solo de nombre.

Si unimos nuestros esfuerzos y reforzamos nuestro espíritu de equipo, seremos capaces de conseguir resultados aún mayores. Es importante aprovechar la diversidad de opiniones y personalidades y cooperar con un espíritu de unidad. Sin esto, por mucho talento individual que tenga el personal que reunimos, no conseguiremos demostrar nuestra fuerza como organización.

Esfuerzo Infatigable por Mejorar: Nos esforzaremos constantemente por mejorar nuestra capacidad de contribución a la sociedad a través de nuestras actividades empresariales. Únicamente a través de este esfuerzo infatigable podremos cumplir con nuestros Objetivos Básicos de Gestión y contribuir a que se establezcan una paz y prosperidad duraderas.

Para cumplir nuestra misión, debemos trabajar poniendo todos nuestros esfuerzos en ello, debemos superar las dificultades y seguir avanzando. Independientemente del tipo de trabajo que realicemos, debemos aprender y pensar siempre con seriedad y debemos hacer los máximos esfuerzos en nuestras actividades poniendo para ello un gran entusiasmo, de modo que pueda surgir una nueva creatividad e ingenio, y para que se produzcan nuevos avances y mejoras.

Cortesía y Modestia: Siempre seremos cordiales y modestos, respetando los derechos y necesidades de los demás para reforzar así unas relaciones sociales saludables y mejorar la calidad de vida de nuestras comunidades.

Debemos respetar las normas de urbanidad y ser humildes en nuestro trabajo. En nuestra vida diaria, es importante que nos esforcemos por tratar a todo el mundo con respeto, que evitemos la arrogancia y que estemos dispuestos a reflexionar críticamente sobre nosotros mismos.

Adaptabilidad: Adaptaremos continuamente nuestra mentalidad y comportamiento para satisfacer las cambiantes circunstancias de nuestro entorno, procurando actuar de manera armoniosa con la naturaleza para garantizar así el progreso y el éxito en nuestras actuaciones.

Debemos comprender correctamente los cambios y la evolución de la sociedad, y debemos seguir adaptándonos a esa evolución y cambios de manera apropiada. Para ello, es importante evitar mirar las cosas desde una estrecha perspectiva, debemos captar las tendencias más amplias que subyacen en lo que está sucediendo, así como comprender su esencia.

Debemos afrontar las cosas de forma directa, tomándolas como son y con objetividad, sin caer en el egocentrismo ni en ideas preconcebidas. Para adaptarnos a una sociedad que progresa y se desarrolla continuamente, no debemos dejar de mantener nuestro firme deseo y esfuerzo de progresar también de manera continua.

Gratitud: Actuaremos con agradecimiento por todos los beneficios que recibimos, seguros de que esta actitud será una fuente de vitalidad y alegría sin límites y nos permitirá superar cualquier obstáculo al que debamos enfrentarnos.

Nuestro trabajo diario y nuestras vidas dependen del apoyo de todas las partes implicadas, incluyendo el apoyo de nuestros compañeros de trabajo, de nuestra empresa, de nuestras familias y de las personas de la sociedad en general. Es importante que siempre devolvamos el apoyo que recibimos con un sentimiento de «gratitud».

Contribuir al progreso de la sociedad con gratitud hacia los demás y el deseo de corresponder a las muchas personas que nos han ayudado nos hará sentir una alegría ilimitada, así como nos llenará de fuerza y valentía para superar cualquier dificultad.